jueves, 2 de junio de 2016

L@S NIÑ@S TAMBIÉN SON PERSONAS. Sobre el Foro "Del proceso creativo a la dramaturgia, de la dramaturgia al proceso creativo". -Por Ivana Altamirano-


El título hace alusión a una frase dicha en tono de humor en el Foro: “Del proceso creativo a la dramaturgia, de la dramaturgia al proceso creativo”, el cual se llevó a cabo el 11 de abril en las instalaciones de la Escuela Integral de Teatro “Roberto Arlt”. Dicha actividad estuvo co-organizada entre el Festival Señores Niños ¡Al Teatro! y Gulubú –Grupo de reflexión y experimentación de teatro para niñas, niños y adolescentes-. Cuatro grupos expositores: Pie Plano, Marabunta Teatro, Tire y Afloje, y Diábolo Títeres compartieron sus experiencias sobre los procesos de creación de sus obras en el marco  de la programación del 16° Festival Señores Niños ¡Al Teatro! Realizado en Córdoba.

Escena de "Nazario..."
Laura Gallo, directora de Pie Plano habló sobre Nazario, el gurí del monte cuyo disparador creativo fue una historia clínica acompañada de entrevistas, fotos y documentos sobre el protagonista real: Nazario. La mezcla de lenguajes tales como la danza, los títeres y las máscaras jugaron un rol fundamental en la construcción escénica y en  la estética del espectáculo. “Dramaturgia abierta”, “dramaturgia didascálica” son los términos que empleó la directora para referirse a la obra contada mayoritariamente con acciones y con las palabras mínimas.

"Lo que esconden los sombreros"
Emanuel Gauna, actor de Marabunta Teatro, se refirió a la obra Lo que esconden los sombreros como un trabajo surgido a partir de la necesidad de contar algo y de “dejar un mensaje para chicos y grandes”. Respeto, aceptación de las diferencias y reflexión, son los ejes temáticos que atraviesan su dramaturgia. Juegos rítmicos, clown y música son algunos de los ingredientes empleados para contar lo que esconden los sombreros.

"Alias mate cosido"
 Carli Bastarrechea habló sobre Alias Mate Cosido, obra surgida a partir del interés despertado por un documental sobre Segundo David Peralta –Alias mate cosido- personaje folklórico del noreste argentino que robaba a las empresas para darle a los pobres. El títere como recurso y sus diferentes posibilidades dieron lugar a la creación escénica donde locura y poesía se mezclaron para crear la obra en torno al personaje de Mate Cosido.  

"Golazo al ánguloooo"
Por último, Marcelo “Colo” Pascale inició su exposición hablado de su amor por el fútbol y de sus imágenes de infancia donde los chicos de distintos barrios se encontraban en los potreros. También hizo alusión a la lectura de textos de A. Dolina, R. Fontanarrosa y E. Galeano a los que él llamó “autores de fútbol” y que fueron algunas de las fuentes consultadas para la creación de Golazo al ángulooo, obra de su autoría. 

Posterior a ello, se abrió a preguntas y aportes del público integrado por teatristas, docentes y estudiantes de teatro. Algunos de los interrogantes surgidos fueron: ¿Qué pasa cuando las niñas y niños participan de la obra? ¿Qué elementos son importantes para hacer un teatro destinado a niñas, niños y adolescentes? ¿Antes de empezar a crear una obra, se define la edad previamente?

Uno de los aspectos en común que dejaron ver  los grupos expositores, es que ninguno de ellos se planteó una edad específica a priori para disponerse a crear. La edad del espectador se va definiendo en el proceso de recepción, probando su funcionamiento con el público. También coincidieron en que sus obras no sólo tienen en cuenta a niñas y niños sino también a sus familias, a los adultos. Esto es precisamente porque el niño no es un ente asilado sino que está inmerso en un contexto social determinado llámese escuela, familia o barrio.

De los espectáculos presentados en el Foro, se observó también que ninguno depende  de la intervención y participación directa del público. Participar significa tomar parte de algo y por ende el sólo hecho de que el niño o niña experimente un acontecimiento teatral implica su participación ya sea mirando, escuchando, sintiendo, pensando o expresando abiertamente -y sin disimulo- lo que le pasa y lo que piensa.

¿Hay recetas para hacer teatro destinado a niñas, niños y adolescentes? Pues no las hay. Pensar que los temas definen si una obra es apropiada o no para ellos tampoco es una condición ya que las temáticas pueden ser variadas, felices o poco felices como la vida misma. “Que se tome un tema doloroso no significa que no haya juego”, decía Laura Gallo, porque el teatro cuenta con el recurso de la metáfora, de la poesía, del juego y eso posibilita hablar de muchas cosas, abordar un tema de distintas maneras.

Bertolt Brecht decía que el arte tiene el privilegio de construir su propio mundo pero también permite entender a la humanidad en una dimensión más amplia. Si bien el teatro consiste en producir representaciones vivas o inventadas con el fin de divertir y entretener, también puede procurar “diversiones débiles” o “diversiones compuestas”.  El teatro para niñas, niños y adolescentes no escapa a ello, puesto que es teatro y los pequeños espectadores “también son personas” con capacidad crítica, acorde  a sus posibilidades y conocimiento del mundo que lo rodea. Es por eso que no hay recetas para crear un teatro destinado a este público pero -en palabras de Laura Gallo- sí “hay algo importante a tener en cuenta que es la responsabilidad”.

Asumir un teatro que considere al niño, niña y adolescente como espectador, implica entender que existen distintas ideas de infancia las cuales están atravesadas por imágenes y representaciones de clase, de género, valores, tradiciones y expectativas sociales. El concepto de niñez es dinámico y cambiante según los distintos contextos sociales, políticos y culturales, y según la mirada disciplinar de cada campo de estudio. Pero la niñez se trata de personas atravesadas por la vida misma, los niños, como decía en el foro Naibi Esteban -integrante de Gulubú- “simplemente son”.


El filósofo Walter Kohan se refiere al tiempo de la infancia como un tiempo aiónico: de juego, de pensamiento, de arte, de creación, de experiencia estética. El tiempo cronológico, en cambio, “es el tiempo del reloj, de los calendarios,  de la escuela y  de las instituciones”. Por consiguiente, teatro es a infancia como infancia es a teatro porque el teatro es justamente juego, creación, experiencia, pensamiento: es un infante. Entonces si los niños y niñas también son personas, el teatro es un niño que juega.




Ivana Altamirano
Miembro de Gulubú, integrante de Chíngaras Teatro,
Actriz, Docente y Lic. en Teatro. 

miércoles, 1 de junio de 2016

Aproximaciones a la noción de niñez


¿Cuando el niño empieza a ser niño?


Según Ariés (HERNANDEZ, CAMPO DELGADO,2015:241) el sentimiento de niñez surge entre el siglo XVI y XVII a través de un proceso donde se le comienza a dar importancia a la niñez como tal y a la condición del menor como "sujeto educable" y prepararlo para la vida adulta. A partir del siglo XIX surgen los primeros intentos para conceptualizar la noción de niñez y ya en el siglo XX se define a la etapa de la niñez desde un punto de vista cronológico: la persona es definida como niño desde su nacimiento hasta aproximadamente los 13 años. Recién en el año 1989, con la Convención sobre los Derechos del niño se establece que es niño: "todo ser humano menor de 18 años de edad, salvo que en virtud de la ley que le sea aplicable, haya alcanzado antes la mayoria de edad". Vemos entonces que el concepto de niñez ha evolucionado a través de los años y que se presenta como una definición dinámica que depende del contexto socio-político e histórico en el que se encuentre inmerso. Dado lo anterior, es necesario tener en cuenta la reflexión de la propia experiencia de niñez de quienes emprenden la tarea de reflexionar acerca de la misma.

BIBLIOGRAFIA:
HERNANDEZ, A; CAMPO DELGADO, A (2015) Actores, Redes y Desafios, Juventudes e infancia en América Latina. Ed Clacso
http://www.unicef.org/argentina/spanish/7.-Convencionsobrelosderechos.pdf //última consulta: 01/06/2015